Tres Marías, lloraban y lloraban porque las manzanas se podrían y
nadie las compraba.
Las tres Marías corrían y corrían
Ya que el amor se les perdía.
Las tres Marías deseaban disfrutar de unas correrías, pero las pobres no sabían donde empezaban y cuando terminaban.
Las tres Marías una noche veraniega se fueron de juerga, para ver si
encontraban algún descarriado marido declarado en Huelga.
Las tres Marías solo deseaban y con pasión buscaban juntar
Nueces y manzanas.
Las tres Marías al espejo se miraban,y con él se molestaban
siempre les decía que estaban chuchurrias ajadas y agurrias.
Las tres Marías con una abuelita
se encontraron con mucho amor la socorrieron, un hada resulto ser, y
tres príncipes les pudo ofrecer,
para en su mansión ellas en el amor pudiesen creer
Los príncipes al verlas tan encantados quedaron que en gaviotas se convirtieron Y con mucho pavor al mar se marcharon.
Las tres Marías asombradas del poder que sus sentimientos y corazones poseían al ver a sus príncipes en tres elegantes y hermosas
gaviotas convertidas
no dudaron y toda su vida al cuidado de ellas se dedicaron.
Ruego perdonéis a este perfecto imperfecto ,por sacrificaros en leer esta cruel literatura.
Ruego perdonéis a este perfecto imperfecto ,por sacrificaros en leer esta cruel literatura.
LAS MARIAS NO TENIAN ARREGLO,JIJIJIIII. UN ABRAZO
ResponderEliminarTres Picaras señoras Marias, al final se merecen que las cuiden.
ResponderEliminarUn beso José.
Jose
ResponderEliminares encantador tu relato y todo tu blog.
Si gustas visitarme,eres bienvenido siempre.
besos
Que peligro tienen las tres Marías.
ResponderEliminarSaludos.
Que tres Marías !!! Ni con encantos se las apaña!
ResponderEliminarUna entrada muy simpática ..jaja
Un fuerte Abrazo amigo.
madre mía...menudas tres!! como la vida misma.
ResponderEliminarUn beso!!
Llamándose Marías, se `ponen el mundo por montera ajjaaj, a disfrutar de la vida como debe de ser.
ResponderEliminarBesitos y sonrisas de una María :-)
Me llamo María pero menos mal que yo no soy una de ellas jajaja.
ResponderEliminarUn beso.
No me llamo María, pero con esos antecedentes menos me identifico por el momento.
ResponderEliminarVaya con las tres María qué simpática entrada.Un placer pasar por tu blog.Abrazos.
ResponderEliminarLo que cuenta son los sentimientos y de eso las Marias tiene mucho. Eres único sacando sonrisas. Un bessito
ResponderEliminar" La suerte de la fea, la bonita la desea ". Aunque no sea este el caso, ni siquiera gracias a la abuelita. Si al fin solo lograron : una mansión y tres gaviotas !.
ResponderEliminarBesitossss Jose.
Hay que risa.. .. mare mia!!!!
ResponderEliminarque las tres marías son las de hoy..
y puesto en marcha el mecanismo ..
no hay quien las pare.... ja,jaja....
me gustan las risas..
besos
¡Estas Maris! já
ResponderEliminarSaludos
José!
ResponderEliminarHá Marias assim, que convertem Príncipes em gaivotas,Outras convertem patos em príncipes.
Abraço,
José.
bello y encantador relato nos regalas querido amigo , infinitas gracias por hacernos participes de el, muchos besinos de esta amiga admiradora.
ResponderEliminarHola José.
ResponderEliminarPobrecitas de las tres Marías.
No hay en Huelga nadíe que de ellas se pueda enamorar? No?
Pués así, mejor de Princípes/Gaviotas cuidar!
Siempre hermosos tus escritos, amigo José.
Una vez más me hiciste reír.
Besos e un gran abrazo.
Janita
con tus tres Marías, me has hecho recordar lo que deciamos cuando eramos pequeñas "las tres Marias, la caca, la mierda y la porqueria" con perdón.
ResponderEliminarUn abrazo
Se vale tener sueños y las 3 Marias los tuvieron y realizaron,interesante y divertido texto. saludos un placer la visita.
ResponderEliminarSegún que Marías, jaja, estas si eres príncipe, mejor no encontrártelas,jaja, pero si eres anciana si, eso se les da mejor.
ResponderEliminarUn abrazo