Mi amigo Freud

 Un señor que hace mucho que no lo veo el cual me dijo llamarse Freud, teniendo con el una interesante conversación en la cual me informaba o más bien me instruía sobre nuestra singular mente, la cual me decía que era muy complicada de poder llegar a comportamientos y  soluciones veraces.

Este amigo me decía mira lo mejor dividimos el comportamiento de los individuos, en tres niveles para mi básicos, el yo (ego) el ello o ID y el super yo o (super ego) disertando con tal magnitud y ese gran entusiasmo que despierta este amigo, que yo me quedaría horas días meses años escuchando sus filosóficas disertaciones.

Más tarde pienso medito todo lo hablado con este amigo, y digo y me pregunto, cómo me explicaría este amigo si conociese que ese (ego) tiene la enorme posibilidad de ampliarse con esos circuitos de compuertas llamados NOR y NAND, los cuales a su vez abren varias puertas de (también llamadas (NAND), por que según vemos las personas ahora les razonas distintos casos distintas materias, y ellas buscan todo los circuitos todas las puertas que nuestro ordenador llámese cerebelo cerebro tienen ,y que son unas estructuras

infinitas. Por eso somos capaces de llegar a la luna

Es una pregunta que no sé responderme. 

Pues en aquellas fechas era impensable que un niño de siete años, supiese enviar mails manejar un ordenador buscar su pagina Web, jugar con una Nintendo, en fin la tecnología estaba reducida en la mínima expresión, con lo cual la mente el campo de razonamiento y reacción estaría supongo un

poco más limitado.

Así existen personas que quieren demostrar una riqueza social, un enorme grado de compresión, pero ¡¡ojo!! Su (ego) es suyo, y jamás querrán dar su brazo a torcer, por que algún circuito puerta lo tienen cerrado, pero nos hacen creer que son poseedoras de todos esos valores llamados comprensión

Humanidad sociabilidad caridad, luego en sus intimidades se siente realizadas diciendo como los he engañado.

 A ver si me encuentro con este amigo y seguimos disertando sobre el tema, pues supongo que estará navegando, lo esperaré en ese faro romano de cuyo nombre dicen que sé llama la Torre de Hércules, llamándose creo porque en barquichuela llego el señor Hércules acompañado de ese otro señor el cual Adolf se hace llamar para regocijo de gallegas