Un buen amigo de esta casa, qué, de nadie en particular es, y si de todo el pueblo en general puede pasar y opinar.
Me mandó este maravilloso escrito el cual creo, le debemos dar la entrada en el máximo de hogares para que muchos piensen en esos valores, qué algunos padres los han perdido, y los niños esperándolos están.
.
Con voz tímida y ojos llenos de expectativa, el pequeño hijo recibió a su padre al volver este del trabajo, y le pregunto.
``papá, ¿Cuánto ganas por hora?``
El padre con gesto severo le respondió, ``Oye, hijo esas cosas ni a tu madre se las digo y ya no me molestes
que vengo muy cansado del trabajo´´.
Pero el niño insistió:
``Pero papá dime por favor cuanto ganas por hora´´.
la reacción del padre fue menos severa y respondió´´
``Gano solamente cincuenta euros por hora´´
El niño volvió a preguntar:
``Papá,¿Me puedes prestar veinte euros ¿´´
El padre se enojo y con mucha brusquedad le dijo:
¡Así que esa es la razón de saber cuanto gano por hora!.
``Vete, ya deberías de estar durmiendo y no molestándome niño, niño egoísta!´´
Un poco después el padre reflexiono sobre lo acontecido, se sentía culpable y no podía ver su programa de televisión tranquilo.
El padre pensaba que quizás su hijo quería el dinero para comprar algo de mucho interés para él, por lo que queriendo descargar su conciencia se levantó del sofá y fue hacia el cuarto del pequeño niño y en voz muy baja le preguntó:
``¿Duermes hijito?´´
No papá respondió el pequeño.
``escucha hijo aquí tienes los veinte euros que me pediste´´
¡Gracias papá! dijo el niño metiendo sus manitas debajo de la almohada y sacando otros treinta euros.
Entonces le dijo:
``¡Papá ahora si estoy muy feliz ya completé cincuenta euros!´´
``Bien hijo ahora me, ¿para qué quieres esos cincuenta euros ?
´´Papá¿Me puedes vender una hora de tu tiempo?
dice que el autor es desconocido, pero su pensamiento debe de ser por todos reconocido.
Ya conocía este relato Jose, y me parece triste y tierno a la vez, cuantos hijos reclaman un tiempo para ser escuchados y sentirse queridos.
ResponderEliminarLa vida que tenemos en estos días hacen que pasen estas cosas, es una pena pero es la dura realidad.
Un abrazo amigo.
Bonita historia, José, ciertamente, las prisas y el trabajo marcan nuestras vidas y ya cada vez dedicamos menos tiempo a nuestros seres queridos, amigos, familia. Abrazos ;-)
ResponderEliminarEs bonita la historia. Andamos tan atareados, que nos olvidamos de lo principal, que es repartir cariño.
ResponderEliminarBuenas noches, Jose. Un beso.
Uffffffffffff.
ResponderEliminarTremendo.
Como un puñetazo.
Es cierto que tendría que entrar en todos los hogares este escrito.
Que bueno.
Saludos.
Yo tambien conocía el relato pero está bien ponerlo para remover conciencias.
ResponderEliminarMe gustó mucho la segunda foto.
Un saludo.
Muy buen relato.
ResponderEliminarY como dice Toro, debería estar en todos los hogares.
Se vive tan apremiado por el tiempo que no nos permite ver que nos estamos perdiendo de algo valioso.
Besitos José.
Realmente bueno este escrito,que todos deberían conocer, yo no lo conocía, y por supuesto un claro reflejo de lo que los niños necesitan: del tiempo de los mayores, de sus padres.
ResponderEliminarUn beso y feliz día.
El relato muy tierno, me encanta.
ResponderEliminarUn beso
Tienes un premio en mi blog, Jose.
ResponderEliminarUn beso muy grande.
Te mereces ese premio y muchos más.
ResponderEliminarBesos, amigo.
Apagare esta diabólica maquina y les inventare un cuento a los niños, buenas noches.
ResponderEliminarUn beso, felices sueños, Jose.
ResponderEliminarQuerido Jose , tambien yo ya he leido este relato me partio el corazon solo de imaginar tantos y tantos niños con falta de afecto , no dudo ni tantito que ese niño juntara su dinerito para comprarle un poco de tiempo a su papa y poder jugar con el
ResponderEliminarTierno Jose , no me equivoco al decir que eres como un Niño porque sientes lo que siente un niño ...Un beso lleno de mucho cariño
me emocionaste y se me partió el alma...
ResponderEliminarUn beso Jose!!! con cariño!!